Gracias a las 16 personas voluntarias que acudieron a la jornada de retirada de plantas invasoras en el río Eo el día 20 de julio 2019, se ha podido mejorar el hábitat de las alisedas atlánticas a lo largo de 1,5 km de ribera fluvial.
La actividad comenzó en el área recreativa de A Retorta en el Concello de Ribeira de Piquín, Lugo, donde participantes provenientes de Ponferrada, Cangas de Onís, Chao de Posadoiro, Vegadeo, Mieres y Oviedo fueron recibidos por parte del equipo del LIFE Fluvial (de INDUROT e InterEo), siendo provistos de material adecuado para la jornada (guantes, azadas y palas).
Personal técnico del INDUROT (Universidad de Oviedo) proporcionó información y material divulgativo sobre el proyecto LIFE Fluvial, las acciones que se desarrollan y formación para reconocer la planta invasora Crocosmia (Crocosmia × crocosmiiflora), objetivo de la jornada de voluntariado. Esta planta es un híbrido artificial creado por el botánico francés Lemoine en el año 1880 a partir de dos especies del género Crocosmia sudafricanas. Debido a su belleza y a la facilidad de cultivo se ha utilizado y utiliza como ornamental en muchas partes del mundo, incluida la región noroeste de la Península Ibérica donde nos encontramos. Las condiciones climáticas presentes en la región, y en especial en los corredores fluviales atlánticos, donde no se ha encontrado enemigos naturales, ha facilitado su expansión, habiéndose convertido en una de las especies invasoras más comunes en los corredores fluviales atlánticos, pudiendo desplazar a las especies autóctonas y alterar los hábitats.
En el proyecto LIFE Fluvial que actúa en la Red Natura 2000, no se emplean productos químicos (herbicidas) en su control, como garantía para evitar posible contaminación del agua o el bosque de ribera derivados de su eliminación. Así pues, la eliminación de esta planta se hace de forma estrictamente manual para que no se dañe el delicado hábitat de ribera y sus habitantes.
Durante la jornada de voluntariado ambiental se sacaron de forma manual más de 2 m3 de Crocosmia que gracias al personal de TRAGSA se procesará para que los bulbos extraídos no se dispersen. La jornada de voluntariado fue un éxito porque se cumplieron los objetivos planteados eliminando la Crocosmia a lo largo del área de trabajo, se divulgaron conocimientos sobre el estado de salud de los corredores fluviales atlánticos y conocimos mucha gente que quiere cuidar la naturaleza y se preocupa por ello.
Esta es la primera de muchas jornadas de voluntariado ambiental dentro del proyecto LIFE Fluvial, a las que esperamos que se vaya uniendo más gente en las distintas cuencas en las que actúa el proyecto, incorporando a la ciudadanía ribereña en la conservación de sus ríos, creciendo la concienciación sobre la importancia de los corredores fluviales y su conservación para que sigan cumpliendo sus funciones ecológicas y proporcionando sus servicios ecosistémicos.
Reiteramos nuestro agradecimiento a todas las personas que asistieron a la jornada y también a TRAGSA por facilitarnos el material de trabajo y al ayuntamiento de Ribeira de Piquín por dejarnos utilizar las instalaciones municipales.
Todas las acciones del proyecto LIFE Fluvial (Mejora y gestión sostenible de corredores fluviales de la Región Atlántica Ibérica) se encuentran cofinanciadas por el programa LIFE. El objetivo del proyecto es la mejora del estado de conservación de corredores fluviales atlánticos en la Red Natura 2000. Para este propósito, el proyecto desarrolla una estrategia transnacional para la gestión sostenible de sus hábitats en varias cuencas fluviales atlánticas de la Península Ibérica (España y Portugal). El proyecto está coordinado por la Universidad de Oviedo (INDUROT), participando como socios la Universidad de Santiago de Compostela (IBADER), Universidad de Lisboa (Instituto Superior de Agronomía), Concello de Ribadeo, InterEo, Asociación de Desenvolvemento Rural Mariñas-Betanzos, TRAGSA y EMALCSA.
